Mi año

2016 ha sido casi el cierre de un ciclo, el de estudiante de teatro. Dentro de lo que es, no se ha separado demasiado del resto de años de este ciclo, en cierto modo he estado estable. He pasado por un curso muy duro (3º) e incluso este 4º se me hace cuesta arriba por momentos, con muchas barreras e impedimentos constantes, pero creo que podré con ellos xD En lo personal, últimamente estoy un poco en crisis, precisamente por el personaje en que estoy metida para el montaje final, estoy muy pesimista, depresiva y sensible, menos mal que estoy en otras obras que traen luz a mi vida (Spamalot y Peter and the starcatcher, que quizá sea la mejor producción en la que he estado nunca) Además de Hairspray, en 2016 he participado en varias obras por las que sí que he cobrado dinero (generalmente trabajo de gratis, es mi estigma) y que me hacen creerme que quizá sí pueda vivir de lo mío sin tener que prostituirme. Además en la RESAD encarné dos de los personajes más bonitos del mundo, Ariel de La Tempestad y Don Gil/Juana de Don Gil de las calzas verdes, mi primer protagonista. He descubierto que adoro el verso y que podría tener futuro en dramaturgia (saqué MH y escribí algunas cosas que fliparon a la gente) He ido a la primera premiere de mi vida, de un corto que protagonicé. He viajado por el norte y me he enamorado del País Vasco. También es el año que más unida me he sentido a la naturaleza desde que viví en Escocia, si no voy a la sierra un par de veces al mes, me ahogo y me muero. He visto muchas obras y películas que me han encantado, de las que no, hago como que me olvido. He descubierto mucha música, de entre ellos, como me recuerda el last, Sangre de Muérdago, los que más me han impactado. He descubierto más que nunca las series, creo que el énfasis a largo plazo de la industria se pondrá ahí, se producen mejores cosas para televisión que para cine últimamente. Sólo hay que mentar Westworld o Stranger Things. He salido poco pero lo suficiente para reunirme con la gente que me importa. He perdido un colega perrete pero ya he conocido uno nuevo. Sigo teniendo a Pascuato. He hecho cosas brutales en acrobacias con una única lesión menor como recordatorio. He dibujado, he leído, he compuesto, he pintado camisetas, he cantado, he bailado, he reído, he llorado.
En general, si me fijo en todas esas cosas buenas, ha sido un buen año, un año más.

¿2017? Me da terror. De verdad. Se acaba el lugar seguro, de protección, la RESAD. Tendré que empezar a comprobar si tengo futuro de lo mío, de lo que me apasiona. Y me da un miedo gigantesco conocer la respuesta. No sé si me quedaré en España, si tendré dinero para comer, si aprobaré siquiera la escuela. Pero sea como sea, voy a lanzarme de cabeza hacia delante, y si me encuentro con alguna piedra en el camino, ya me preocuparé del golpe cuando me duela.