El país que nos merecemos

Viernes tarde noche en Madrid. La gente socialmente bien insertada abandona sus puestos de trabajo o quehaceres y se da al ocio, las compras o eso tan hermoso de fomentar las amistades, sobre todo en los bares.

Pero sepan ustedes que existe una facción de rebeldes. Unos individuos en apariencia normales y socialmente bien insertados, que se echan a las calles para manifestarse por y para sus ideas. Podían estar haciendo botellón, ligando en un bar o tomando unas patatas bravas, pero no.

Decenas de anti sistema prefirieron hace unas horas tomar las plazas en su rato de asueto para reclamar lo que ellos consideran justo para toda la ciudadanía. ¿Qué pedían estos comunistas bolivarianos de nuevo cuño? ¿Por qué se hicieron con la plaza de Callao y la Puerta del Sol?

Los loables ideales de estos manifestantes (dos contingentes, a la postre enfrentados entre sí) eran apoyar a Carlos Lozano unos, y a Laura Matamoros otros. Sí, tal cual lo leen: Manifestarse en favor de uno y otra para que ganen la -se ve que muy reñida- próxima final de Gran Hermano Vip.

Sendas manifestaciones fueron convocadas por la producción del programa. Lo sorprendente, es que tuvieran tanto predicamento, porque el centro de Madrid a eso de las 20.15 se colapsó, hasta el punto de que la manifestación en favor de Laura Matamoros tuvo que trasladarse de Sol a Cibeles "por motivos de seguridad".

Se escucharon vítores, slogans y canturreos varios mientras los asistentes se hacían selfies y tuiteaban sobre su apasionante lucha. Y es que el poder de las redes sociales es incuestionable en estas lides. A través de ellas se organizaron y a través de ellas narraron sus protagonistas cada paso y cada apoyo. Y también los viandantes, que al toparse con unas manifestaciones de este calado, fotografiaban y colgaban su particular crónica con los hashtags pertinentes.

Pancartas, gritos, familiares y amigos apoyando, y mucha emoción contenida. Esto es lo que se vivió ayer mismo, un ejercicio democrático de creencias diferentes y sin enfrentamientos entre sí.

Ambas concentraciones se desarrollaron sin incidentes de gravedad y se disolvieron pacíficamente al caer la noche en Madrid, que continuó con su ajetreada vida nocturna de viernes como si nada.

Todavía no hay visos de un acuerdo de gobierno, la economía parece haberse estancado en una inacabable meseta, la tasa de paro sigue siendo una vergüenza para cualquier país, y la trama de los papeles de Panamá acaba de asomar sólo un poquito. Pero no se preocupen ustedes, Laura Matamoros o Carlos Lozano se harán con el maletín de 100.000 euros, y será gracias a cientos de esforzados ciudadanos que habrán apoyado una u otra candidatura.

Habrá quien recuerde Abril de 2016, como el momento histórico en el que la gente se echó a las calles para manifestarse en España. Y es que, como dijo un torero a Ortega y Gasset al saber que se dedicaba a la filosofía "Hay gente pá to´").